Hoy en día la memoria es muy barata. Y tener un sistema operativa a prueba de bombas es tan sencillo como bajar al quiosco de la esquina y comprar alguna revista con un DVD que traiga una distribución de Linux.
Pero... a veces nos enfrentamos a problemas verdaderamente muy grandes, más que la memoria física. En esos casos hay que usar otras técnicas (por ejemplo, ver si se puede dividir el problema grande en otros más pequeños), o, finalmente, usar el espacio ocupado por los ficheros en el disco duro como una extensión de la propia memoria RAM. En esos casos hay que buscar en CPAN los módulos que se llamen
mmap.